El acceso a medicamentos es un tema ampliamente debatido en el ámbito de la salud, donde la adquisición de tratamientos innovadores—los cuales representan los avances más recientes en tecnología y medicina—ha cobrado relevancia debido a los progresos en la investigación científica.
En este contexto, Chile enfrenta retos en relación con la disponibilidad de estos medicamentos, que suelen tener un costo elevado y están destinados a enfermedades crónicas, especialmente por el tiempo que se requiere para acceder a ellos.
Un estudio de la Federación Latinoamericana de la Industria Farmacéutica (Fifarma), citado por El Mercurio, analiza la situación en 10 países (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Panamá, Perú y República Dominicana) y señala que los pacientes en Chile deben esperar, en promedio, más tiempo para recibir tratamientos que ya han sido aprobados globalmente.
La investigación indica que el tiempo promedio en la región, desde la aprobación de un medicamento por la FDA (Estados Unidos) o la EMA (Europa) hasta su disponibilidad total es de 57 meses, aproximadamente 4,7 años.
Por el contrario, en Chile, el tiempo de espera en el sector público, ya sea a través del GES o la Ley Ricarte Soto, se extiende a 63 meses, es decir, 5,2 años.
Yaneth Giha, directora ejecutiva de Fifarma, subraya que en la región hay “un tiempo de espera bastante prolongado para acceder a tratamientos innovadores de última generación, aquellos que han sido recientemente desarrollados por la industria farmacéutica y aprobados en Estados Unidos y Europa en la última década.
“Así, un medicamento aprobado en octubre de 2024 por la EMA o la FDA no estará disponible en Latinoamérica hasta, en promedio, agosto de 2029”, detalla la economista colombiana.
Por otro lado, Mariela Formas, vicepresidenta ejecutiva de la Cámara de la Innovación Farmacéutica (CIF)—organización que colaboró en el estudio—destaca que otro hallazgo muestra “la inequidad entre los sistemas público y privado, donde hay un 49% más de medicamentos disponibles en el sistema privado.
“En Chile, la cobertura y los tiempos de espera para acceder a medicamentos innovadores se ven afectados por una combinación de barreras burocráticas, lentos procesos regulatorios y limitaciones en la infraestructura y recursos disponibles”, señala la ingeniera comercial.
En este sentido, menciona que la decisión de ampliar la “cobertura de medicamentos innovadores en la Ley GES y Ricarte Soto ocurre cada tres años o más. Por ejemplo, la última vez que se integraron nuevos medicamentos a la Ley Ricarte Soto fue en 2019.”
PURANOTICIA
Con Información de puranoticia.pnt.cl