La Unidad de Fiscalización de Seguridad Pública, en colaboración con Carabineros, la Seremi de Salud y otras instituciones, llevó a cabo un operativo en Rancagua que resultó en clausuras, decomisos e incautaciones en varios establecimientos comerciales.
Entre las acciones más significativas, se cerró una carnicería ubicada en la población 13 de Mayo debido a que representaba un riesgo para la salud pública. Además, se emitieron citaciones a locales como el restaurante Hopfen, situado en la calle Estado N.º 34, por operar como discoteca, lo cual contraviene la normativa vigente.
Asimismo, el establecimiento Laberintos fue multado por no poseer las patentes municipales correspondientes para «centro de eventos» y «arriendo».
Se realizó también un decomiso de bebidas alcohólicas en un domicilio clandestino en San Martín 285, asegurando productos en condiciones irregulares.
Estas acciones son parte del compromiso de la Municipalidad de Rancagua con la protección de la comunidad y el mantenimiento del orden público en la ciudad.
Con Información de www.elrancaguino.cl
