El presidente Gabriel Boric lideró una cadena nacional para celebrar la aprobación de la reforma al sistema de pensiones, subrayando que esta medida beneficiará a 2,8 millones de jubilados al aumentar sus pagos mensuales. La iniciativa recibió apoyo en la Cámara de Diputados tras un largo debate y, según el Mandatario, representa un hito en la historia del país, después de varios intentos fallidos de modificar el sistema previsional.
Boric describió la reforma como un “imperativo ético y un acto de justicia”, afirmando que responde a una deuda histórica con los trabajadores informales y, en particular, con las mujeres, quienes han sufrido más por las “lagunas previsionales”. En su discurso, recordó a quienes han enfrentado la vejez en condiciones de pobreza y destacó que esta reforma busca dignificar su situación.
El Presidente enfatizó que este cambio significa el mayor aumento en las pensiones desde la creación del sistema en los años 80, con incrementos que variarán entre un 14% y un 35%, otorgando un beneficio mayor a las mujeres para rectificar la histórica desigualdad en las jubilaciones. En este contexto, señaló que la reforma “tiene rostro de mujer” y que, por primera vez, se garantizará equidad de género en los montos de pensión.
Además, Boric destacó que este avance no es un esfuerzo aislado de su gobierno, sino que se basa en mejoras previas impulsadas por administraciones anteriores, mencionando los aportes de Michelle Bachelet y Sebastián Piñera en el ámbito de la protección social, como el seguro de cesantía, el GES y el Pilar Solidario.
Aumento gradual de la PGU y nuevo modelo previsional
Uno de los anuncios más importantes fue el incremento de la Pensión Garantizada Universal (PGU) a $250.000, una medida que comenzará a implementarse en septiembre para 800 mil beneficiarios y que se extenderá gradualmente a todos los pensionados en un plazo de dos años. De acuerdo con Boric, este aumento permitirá que la pensión mínima supere la línea de pobreza.
El nuevo sistema previsional se basará en tres pilares: la contribución estatal, el ahorro individual y la creación de un seguro social financiado con cotizaciones gradual de los empleadores. Boric explicó que la transición será gradual para evitar impactos negativos en el empleo, especialmente en las pequeñas y medianas empresas.
El Mandatario también resaltó que las mujeres podrán acceder a una pensión equiparable a la de los hombres con solo diez años de cotización, en comparación con los veinte requeridos para ellos. Esto, aseguró, incentivará la formalización laboral femenina y ayudará a cerrar la brecha de género en el sistema de pensiones.
Críticas a las AFP y reconocimiento de consensos políticos
Boric reconoció que la industria de las AFP mostró resistencia a la reforma y señaló que la nueva legislación fomentará la competencia, disminuirá costos y permitirá la inclusión de nuevos actores en la gestión de fondos de pensiones. En este sentido, apuntó que las comisiones se ajustarán según el rendimiento de los fondos, en lugar de ser un cobro fijo como ocurre actualmente.
A pesar de que el Mandatario admitió que la reforma no abarca todos los cambios que su administración deseaba, valoró la capacidad de llegar a acuerdos en el Congreso y destacó que este avance es un reflejo de responsabilidad política. “Pensamos fuera de la caja en un Congreso pluralista. Se mostró responsabilidad hacia Chile”, afirmó.
Finalmente, Boric concluyó su discurso haciendo un llamado a la ciudadanía a valorar este progreso y a seguir trabajando por una mayor equidad en el país. “Con valentía y amor por Chile, avanzamos hacia un país donde la vida digna sea una realidad para todos”, expresó antes de finalizar.
Con Información de hoysantiago.cl