“Me desperté una hora antes, lleno de nervios, así que decidí revisar la página web y fue ahí cuando vi el resultado”, cuenta Lucas González, quien se ha convertido en el primer estudiante de un establecimiento municipalizado de Osorno en obtener un puntaje nacional perfecto (1.000) en Matemática.
A este mérito se suman los sobresalientes resultados de Fiorella González, quien alcanzó 992 puntos, y de Rolando Roa y Javier Coronado, ambos con 938. Lo curioso es que los cuatro brillaron en la prueba de Matemática 1 y son egresados del Liceo Carmela Carvajal, con la meta de destacar en el proceso de admisión 2025 a la Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES).
Lucas menciona que siempre ha tenido aptitudes para el área de los números, por lo que tanto su familia como amigos creían que estaría entre los mejores del país. Los cuatro estudiantes asistieron al preuniversitario municipal y agradecieron el apoyo del liceo. Sin embargo, coinciden en que, a pesar de los recursos y materiales disponibles, lo más importante es el esfuerzo y la dedicación personal.
Respecto a este notable logro de los jóvenes locales, el alcalde de Osorno, Jaime Bertin, comenta: “Es admirable y digno de reconocimiento que tengamos un puntaje a nivel nacional dentro de nuestra educación municipal. En el caso de Lucas, es fundamental destacar su esfuerzo y todo lo que ha hecho para que las instituciones municipales se hagan notar a nivel nacional, lo cual es de gran relevancia. También es meritorio el compromiso de su familia y compañeros, quienes han puesto el empeño necesario para sobresalir”.
El alcalde también añade: “Felicitaciones a Lucas y a los demás alumnos. Tuvimos tres puntajes superiores a 900, también del Liceo Carmela Carvajal, así que mi reconocimiento también va para el director y los profesores. Quiero expresar mi respeto y admiración por el esfuerzo que realizan para ayudar a los jóvenes a alcanzar sus metas”.
RUMBO A LA INGENIERÍA
Lucas tiene el deseo de estudiar Ingeniería Civil Industrial: “No estoy seguro de dónde todavía”, admite, aunque señala que muchos estudiantes sueñan con titularse en una universidad tradicional de Santiago. Sin embargo, también le gustaría estar más cerca de su hogar, por lo que Valdivia es una posibilidad.
Fiorella González, quien logró 992 puntos, estuvo muy cerca de conseguir un puntaje nacional. “Estoy muy feliz con mi resultado. Realmente satisfecho, porque refleja el esfuerzo de estos años y el apoyo de mi familia, amigos y de todos los que siempre me apoyaron”, comparte.
Fiorella desea estudiar Ingeniería Comercial, aunque no descarta la opción de estudiar Ingeniería Civil Industrial. También planea mudarse a Santiago, ya que le gustaría asistir a la Universidad Católica, siendo la Universidad de Chile su segunda opción. “Mis familiares están muy emocionados con mi logro”, agrega.
Al igual que Lucas, Fiorella considera que, aunque hay diferencias entre colegios particulares, subvencionados y la educación municipal, el verdadero factor determinante es el esfuerzo personal. “Si un alumno no se esfuerza desde temprano, no será un buen estudiante ni un buen profesional, independientemente de egresar de una institución privada. El mérito propio es primordial”, subraya.
Fiorella aconseja a los estudiantes de tercero y cuarto medio que no se sobrecarguen. “Ese fue un error que cometí; me sobrecargué de trabajo hasta estresarme. Hay que estudiar con calma, pero siempre con responsabilidad. Aunque un puntaje no define tu futuro o quién eres como persona, puede abrir muchas puertas y ofrecer un importante impulso”, explica.
LA IMPORTANCIA DEL ESFUERZO
“Lo primero que sentí fue tranquilidad, luego de un año de trabajo para lograr ese puntaje”, relata Rolando Roa, quien alcanzó 938 puntos en Matemática, lo que lo posiciona como uno de los mejores de la educación municipalizada local. A las 8 de la mañana ya estaba revisando los resultados con su familia, ya que a la hora siguiente iniciarían las postulaciones.
Rolando también asistió al preuniversitario municipal, complementando los conocimientos adquiridos en el liceo con su dedicación personal. “El Liceo Carmela Carvajal te proporciona las herramientas necesarias, pero el trabajo individual es esencial”, enfatiza.
“Recibir la noticia de los 938 puntos fue una inmensa satisfacción. Mi familia se alegró mucho, especialmente porque esta prueba fue a la que más dedicación le di”, reconoce Javier Coronado, quien también obtuvo 938 puntos y fue compañero de Lucas en la Escuela Suiza.
Javier sueña con estudiar Medicina en la Universidad Austral en Valdivia. Sin embargo, planea tomarse un año para trabajar, pues el aspecto económico es un desafío para iniciar su educación superior. “Necesito ahorrar dinero y luego postular a la gratuidad. Estoy dispuesto a aceptar cualquier trabajo, porque lo importante es ganar experiencia”, comenta.
Con Información de osornoenlared.cl