La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado sobre un aumento notable de los casos de COVID-19 a nivel global, causado por la propagación de la nueva variante NB.1.8.1. En su informe más reciente, publicado el miércoles, la OMS indicó que la tasa de positividad ha alcanzado un 11% en 73 países, un nivel que no se veía desde julio de 2024, en comparación con el 2% registrado en 110 países en febrero de 2025.
Este incremento de infecciones se concentra especialmente en naciones del Mediterráneo Oriental, el Sudeste Asiático y el Pacífico Occidental, según lo detallado por el organismo internacional.
La expansión de NB.1.8.1
La OMS señaló que entre enero y mayo de 2025, las tendencias globales del SARS-CoV-2 han cambiado, registrándose un aumento sostenido de la variante NB.1.8.1, la cual fue clasificada como variante bajo monitoreo (VUM) desde el 23 de mayo. Esta variante se detectó por primera vez el 22 de enero y actualmente representa el 10,7% de las secuencias globales reportadas.
Se ha documentado un reemplazo gradual de otras variantes, como la LP.8.1, que fue dominante a mediados de marzo y ha ido disminuyendo desde abril, mientras NB.1.8.1 avanza.
Regionalmente, entre las semanas epidemiológicas 14 y 17 de 2025, se ha observado un aumento de la circulación de NB.1.8.1 en:
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Pacífico Occidental: del 8,9% al 11,7%
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Américas: del 1,6% al 4,9%
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Europa: del 1,0% al 6,0%
En el Sudeste Asiático se han registrado solo cinco secuencias, sin reportes en África ni en el Mediterráneo Oriental.
Transmisión y síntomas
Expertos internacionales han señalado que la variante NB.1.8.1 presenta una mayor capacidad de contagio. En Estados Unidos, ha sido detectada en varios aeropuertos; según investigadores como Subhash Verma y Amy Edwards, esta variante se adhiere de manera más eficiente a las células humanas, facilitando su propagación. Sin embargo, no se ha relacionado con una mayor gravedad clínica.
Los síntomas más comunes son:
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Tos
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Dolor de garganta
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Fiebre
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Fatiga
A pesar del incremento de casos y hospitalizaciones en algunas áreas, la OMS subrayó que no hay evidencia de un aumento en el ingreso a unidades de cuidados intensivos ni de mortalidad asociada a esta variante.
Además, la organización reafirmó que las vacunas actualmente aprobadas mantienen su eficacia ante la variante NB.1.8.1, tanto en casos sintomáticos como en cuadros graves.
Con Información de hoysantiago.cl
