Con el objetivo de mejorar la seguridad en los viajes interurbanos, se ha demandado un aumento en las fiscalizaciones y la implementación de medidas necesarias para hacer más seguros estos trayectos, con el fin de evitar tragedias durante los fines de semana largos.
La creciente inquietud por los accidentes de tráfico en periodos de descanso prolongado ha vuelto a poner de manifiesto la alarmante falta de cumplimiento de una normativa crucial: la obligatoriedad del uso del cinturón de seguridad en buses interurbanos. Estas preocupaciones son especialmente relevantes en fechas donde hay varios días festivos, como Semana Santa y las Fiestas Patrias.
Un claro ejemplo se da en la Provincia del Biobío, donde el aumento en la cantidad de pasajeros y buses es notable, debido a los viajes que se realizan tanto dentro como fuera de la región. Por ello, se ha solicitado un refuerzo en las fiscalizaciones de estos servicios de transporte, con el objetivo de aplicar un control más riguroso.
En esta línea, la diputada Karen Medina ha realizado un llamado urgente para intensificar las fiscalizaciones, afirmando que “no podemos seguir considerando el uso del cinturón como una mera recomendación. Si es obligatorio, debe ser aplicado con firmeza en todos los terminales y rutas del país”. Para la parlamentaria, la falta de un control consistente ha promovido una peligrosa cultura de indiferencia entre los pasajeros.
Aunque todos los buses interurbanos están equipados con cinturones de seguridad, su uso sigue siendo desatendido por una gran parte de la población. “El desafío no radica en la falta de equipamiento, sino en la escasa fiscalización. Carabineros debe desempeñar un rol más activo y severo frente a este incumplimiento”, subrayó Medina, enfatizando la necesidad de controles más visibles y consistentes.
Fortalecer campañas y fiscalizaciones para la seguridad en buses
Esta situación resalta la importancia de implementar un esfuerzo sistemático, que anteponga la colaboración entre medios de comunicación, campañas y la cooperación entre el sector público y privado. “La población debe reconocer que el uso del cinturón puede ser determinante para salvar vidas. Por eso, requieren campañas intensivas, utilizando tanto medios tradicionales como plataformas digitales, para alcanzar todos los rincones del país”, comentó.
Además, se hace un llamado a que los mismos usuarios de los buses interurbanos participen en la labor de prevención haciendo uso del cinturón de seguridad. A pesar de que las empresas enfatizan que su uso es obligatorio, lamentablemente, un considerable porcentaje ignora estas indicaciones.
Frente a esta problemática, se ha enviado un oficio tanto al Ministerio de Seguridad como al de Transportes para exigir un refuerzo en los operativos de control, así como una revisión de las sanciones actuales para quienes desatiendan la normativa. Se hace hincapié en la necesidad de proteger vidas mediante la mejora de la implementación de este elemento de seguridad.
Con nuevos fines de semana largos por delante, la Región del Biobío se presenta como un punto crítico en el que se espera un cambio significativo en la forma en que se gestiona la seguridad en el transporte interurbano. El reto no solo radica en las leyes, sino en lograr que se cumplan y se reconozcan como un acto básico de responsabilidad.
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Con Información de elcontraste.cl