El domingo, los rebeldes sirios anunciaron la caída del presidente Bashar al-Assad tras tomar el control de Damasco, lo que forzó su huida y puso fin a años de dominio familiar, después de más de 13 años de guerra civil, marcando un momento clave en la historia de Oriente Medio.
Los rebeldes islamistas también han debilitado significativamente la influencia de Rusia e Irán en la región, pues estos han sido aliados cruciales que sustentaron a Assad durante momentos críticos del conflicto.
Tras la toma de Damasco, la embajada de Irán fue atacada por los rebeldes sirios, según reportó el canal iraní en inglés Press TV el domingo.
Con Información de radioportales.cl