Por: Raúl González, director Comercial y Clientes para Hispanoamérica en InterSystems Latam.
La inteligencia artificial generativa está cambiando el panorama del sector salud. Desde diagnósticos más precisos hasta la mejora en la administración hospitalaria, sus aplicaciones han mostrado un efecto positivo en la eficiencia y calidad de la atención. En Chile, la discusión sobre su regulación avanza a través de un proyecto de ley que busca establecer un marco normativo para su desarrollo e implementación.
Uno de los mayores retos es asegurar la fiabilidad y trazabilidad de los algoritmos. Si bien la IA puede procesar grandes volúmenes de datos en cuestión de segundos, sin regulaciones que garanticen que sus resultados sean comprensibles y verificables, su funcionamiento podría convertirse en una «caja negra». Una normativa adecuadamente diseñada permitirá que los modelos sean auditables, asegurando que las decisiones automatizadas sean confiables para los médicos y estén libres de sesgos.
Este proyecto de ley también es fundamental para proteger la privacidad de los pacientes y mejorar la ciberseguridad en el manejo de datos clínicos. La interoperabilidad y las historias clínicas electrónicas (HCE) requieren un acceso seguro a información médica; sin reglas claras que limiten el uso de esta tecnología, se incrementa el riesgo de violaciones de la confidencialidad y adecuados tratamientos derivados de un uso irresponsable de datos sensibles. La regulación permitirá establecer principios de uso ético, intervención humana y protección de derechos, asegurando que la IA funcione como una herramienta de apoyo.
El debate en el país está alineado con directrices internacionales y propone un enfoque basado en niveles de riesgo, lo que permitirá establecer diferentes estándares según el impacto de cada aplicación en la atención al paciente. Esto es esencial en el ámbito sanitario, donde la IA no es un concepto homogéneo: desde asistentes virtuales para gestionar citas hasta algoritmos que asisten en decisiones clínicas, su impacto varía y, por lo tanto, sus requerimientos deben ser diferenciados.
Con un marco legislativo claro, Chile podrá incentivar la inversión en soluciones digitales de IA que sean seguras y confiables, lo que fomentará la innovación en el sector médico sin comprometer los derechos de los pacientes. Además, facilitará la creación de un entorno en el que los desarrollos tecnológicos cumplan con estándares de calidad, generando mayor confianza en su uso y promoviendo la integración de nuevas herramientas en los sistemas de salud.
Regular la IA no implica detener su progreso, sino crear las condiciones adecuadas para que su desarrollo sea seguro, accesible y ético. La discusión actual es una oportunidad para que Chile adopte nuevas tecnologías con un enfoque que priorice tanto la innovación como la protección de las personas.
El post Ley de Inteligencia Artificial: El siguiente paso para transformar la salud en 2025 apareció primero en Osorno en la Red.
Con Información de osornoenlared.cl