Se generó un gran revuelo en las afueras de la cárcel de San Miguel cuando el diputado Joaquín Lavín León llegó para visitar a su esposa, Cathy Barriga, quien se encuentra en prisión. Esta fue la primera ocasión que el parlamentario asistió al centro penitenciario desde la detención de su esposa.
Llegó aproximadamente a las 14:00 horas y encontró a una multitud de personas esperando para ingresar, así como a varios medios de comunicación. No obstante, distraído por las preguntas de los reporteros, el diputado ignoró el final de la fila, lo que provocó descontento entre los asistentes. Según informes de Meganoticias, algunos comenzaron a exigirle que hiciera la fila como todos los demás e incluso le arrojaron agua.
La llegada de Lavín suscitó la ira de varias personas, quienes le gritaron insultos y expresaron su descontento. Algunos de los comentarios que se escucharon incluyeron: «¡La vida tiene muchas vueltas!», «¡Debería estar trabajando!» y «¡Vete a casa!».
Ante la incómoda situación, el diputado accedió a responder algunas preguntas de los medios, manifestando que «evidentemente esto es bastante molesto, tanto para la prensa como para la gente». A pesar del ambiente hostil, Lavín subrayó que su único objetivo era verificar el estado de su esposa. «Ella es una mujer muy fuerte y valiente, es consciente de que enfrenta una situación muy injusta y cree que todo saldrá bien», añadió.
Previo a entrar al penal, Lavín también confirmó que la defensa de Cathy Barriga ya había presentado una apelación para intentar revocar su prisión preventiva en un esfuerzo por conseguir su liberación.
Así recibieron a Joaquín Lavín al llegar a la cárcel para visitar a Cathy Barriga. pic.twitter.com/7T4rK34u54
— Todo lo que pasa (@TodoPasaCL) 15 de noviembre de 2024
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Con Información de elcontraste.cl