sábado 19 abril 2025
16.7 C
Santiago

Las tecnologías pueden contribuir a mantener hábitos saludables a largo plazo.

Para comprender por qué a veces resulta tan difícil mantener hábitos saludables, es fundamental examinar nuestras motivaciones. Cuando se nos presenta la opción entre un helado y una ensalada, ¿por qué muchos de nosotros elegimos directamente el postre? La respuesta radica en que nuestro cerebro está diseñado para buscar recompensas. El incremento de dopamina que sentimos al disfrutar una golosina nos señala que estamos experimentando algo valioso. Esta es una forma de refuerzo positivo hacia nuestra acción.

“La búsqueda de recompensas puede afectar a los tratamientos de salud”, advierte la Dra. Milagro Sosa, Directora Médica de Abbott. “Aunque racionalmente se reconozca la importancia de seguir las indicaciones del médico, la ausencia de una ‘recompensa’ o satisfacción inmediata a menudo dificulta la adherencia a los tratamientos”.

De hecho, un estudio de 2018 reveló que una de cada dos personas con enfermedades crónicas no sigue el régimen de medicamentos adecuadamente (1). Además, un estudio de 2012 demostró que los pacientes con hipertensión no cumplen con más del 50 a 70% de las dosis recomendadas (2).

Mantener la adherencia a los tratamientos trae consigo beneficios significativos para la salud. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), si toda la población siguiera sus tratamientos y adoptara hábitos saludables, podríamos lograr más en términos de salud que cualquier avance médico (3).

En busca de recompensas

Cuando identificamos los beneficios de un tratamiento, es más probable que nos sintamos motivados a mantenerlo. Sin embargo, en el caso de enfermedades crónicas que requieren un seguimiento a largo plazo, los beneficios pueden no ser inmediatos. ¿Cómo mantener la motivación? Una posible solución es establecer nuestras propias “recompensas”.

“La acción suele generar motivación, no al contrario”, explica la Dra. Sheri Pruitt, científica del comportamiento y psicóloga clínica. “Al dar el primer paso, incluso si no tenemos ganas, se activa una sensación de logro o recompensa. Esto, a su vez, alimenta nuestra motivación para seguir adelante. No esperes a sentirte motivado; comienza a actuar y deja que la motivación te siga”.

La tecnología también puede desempeñar un papel crucial al proporcionar refuerzos positivos que nos ayuden a encaminar nuestras acciones. Existen diversas herramientas disponibles, como:

Dispositivos de fitness o wearables. Estos dispositivos proporcionan recordatorios, frases motivadoras y monitoreo en tiempo real de parámetros de salud. Se pueden programar para ayudar a las personas a cumplir sus objetivos de salud y establecer metas, ya sea para tratar una enfermedad o promover el bienestar general.

Un estudio realizado por Abbott en 2024 indicó que los pacientes que realizaron un monitoreo remoto para el tratamiento de la diabetes lograron mejores resultados en indicadores de salud comparado con aquellos que no contaron con este seguimiento (4).

Aplicaciones de salud y rastreadores de progreso. Algunas ofrecen apoyo personalizado e información para fomentar hábitos saludables. Por ejemplo, la aplicación My a:care de Abbott (disponible en Google Play y App Store) combina la ciencia del comportamiento con la salud digital para ayudar a las personas a seguir su tratamiento y llevar una vida más saludable.

Gamificación. La aplicación de la lógica de los videojuegos a la salud proporciona una excelente solución para ofrecer refuerzos positivos, al ofrecer recompensas virtuales que mantienen la motivación alta.

Inteligencia artificial. Las herramientas de IA pueden ofrecer consejos sobre cómo modificar comportamientos, combatir malos hábitos y cultivar otros mejores, personalizando los resultados según edad, demografía, geografía, entre otros factores.

Cómo consolidar los hábitos de salud

Con el tiempo, la necesidad de recompensas disminuye, ya que al realizar una tarea de manera regular logramos establecer una rutina. Si seguimos este hábito durante un tiempo adecuado, se convertirá en una acción automática y desinhibida, lo que indica que hemos consolidado nuestro hábito saludable y podemos disfrutar de sus beneficios.

“Los hábitos saludables pueden incrementar tu energía, mejorar tu estado de ánimo, combatir enfermedades y aumentar tu resistencia”, comenta la Dra. Milagro Sosa. “Sin embargo, es crucial no ser demasiado exigente contigo mismo cuando las cosas no salen como se planea. Desarrollar y mantener hábitos es un proceso a largo plazo. Busca apoyo, utiliza las tecnologías disponibles, celebra cada pequeño logro y no te desanimes; mantente enfocado en el objetivo final: lograr una mejor salud”.

Es fundamental seguir los tratamientos tal como han sido prescritos por el médico. Sin duda, esforzarse por mantener los hábitos es valioso para su consolidación a largo plazo.

Con Información de osornoenlared.cl

Más leído esta semana

Temas

spot_img

Artículos relacionados

Categorías populares

spot_imgspot_img