La familia Saldías Castillo de Parral deslumbra a la comunidad con su espectacular decoración navideña. Cada año transforman su hogar en un mundo mágico repleto de luces y adornos.
La familia Saldías Castillo, integrada por Jacqueline, Armando y su hijo Benjamín, lleva más de cinco años convirtiendo su hogar en un atractivo de Villa Doña Pilar 1, en el sector Buenos Aires de Parral. Anualmente, su casa se convierte en un deslumbrante espectáculo de luces y adornos, atrayendo a cientos de visitantes provenientes de ciudades como Cauquenes, Talca y Concepción.
Lo que inició como una tradición familiar ha evolucionado en un evento anual que mantiene a la comunidad local expectante. Condecoraciones que incluyen pascueros danzantes, figuras tocando el saxofón, renos, trenes y un trineo, la vivienda de los Saldías Castillo se ha convertido en un destino turístico en Parral, especialmente para familias y niños que llegan emocionados para capturar momentos en este mágico entorno.
Jacqueline Castillo comparte que, aunque el trabajo es intenso y consume un tiempo considerable —inician preparativos en la primera semana de diciembre y reciben visitas hasta la madrugada—, la alegría en los rostros de los niños y los aplausos de los visitantes hacen que el esfuerzo valga la pena. “El esfuerzo es grande, pero lo que más nos llena es ver la felicidad de los niños en Navidad”, comenta sonriente.
Innovando cada año
La familia siempre busca nuevas ideas. Cada año añaden novedades en la decoración, introduciendo figuras y detalles singulares. Este año, por ejemplo, consideraron incluir una máquina de nieve artificial, aunque decidieron dejarla para la próxima Navidad. “Nos apasiona la Navidad y la alegría de los niños, eso no tiene precio“, afirma Jacqueline.
Armando, por su parte, se encarga de toda la iluminación del hogar y también crea muchas de las luces con sus propias manos. Junto a Jacqueline, se asegura de que todo esté perfectamente dispuesto, ofreciendo siempre un espectáculo visual inolvidable a quienes los visitan. Para él, lo más relevante no es solo el trabajo realizado, sino que los niños disfruten de un momento de diversión pleno de espíritu navideño, viviendo la magia de estas festividades de una forma única y especial.
En un mundo cada vez más veloz, el esfuerzo de la familia Saldías Castillo por mantener viva la magia de la Navidad se convierte en un regalo genuino para Parral. A través de su dedicación y amor por esta temporada, no solo iluminan su hogar, sino también los corazones de los que vienen a visitarlos. La Navidad en la casa de los Saldías Castillo es un recordatorio del valor de compartir momentos de alegría y gratitud con las personas que nos rodean, manteniendo vivo el espíritu de estas fiestas.
Con Información de www.diarioelcentro.cl