Antes de iniciar un viaje en auto, es fundamental comprobar la presión de los neumáticos, ya que esta es una de las medidas de seguridad más importantes. Una presión inadecuada no solo afecta la estabilidad del vehículo, sino que también puede incrementar el consumo de combustible, reducir la durabilidad de los neumáticos y, lo más crítico, poner en peligro la seguridad de los pasajeros.
Es importante tener en cuenta que la presión óptima de los neumáticos está especificada por el fabricante y puede variar dependiendo del modelo. Puedes encontrar esta información en el manual del propietario, en una etiqueta ubicada en el marco de la puerta del conductor y, en algunos casos, dentro de la tapa del tanque de combustible. La presión se mide en unidades como psi (libras por pulgada cuadrada) o bar y suele diferenciarse entre la presión adecuada para condiciones normales y para cuando el vehículo está completamente cargado.
RIESGOS DE UNA PRESIÓN INCORRECTA
Si la presión es inferior a la recomendada, puede haber un desgaste excesivo en los bordes del neumático e incrementar la resistencia al rodar, lo que a su vez eleva el consumo de combustible. También hay un mayor riesgo de reventones y se disminuye la capacidad de maniobra. En cambio, una presión excesiva provoca un desgaste prematuro en el centro de la banda de rodadura y reduce la adherencia al asfalto, especialmente en condiciones de lluvia. Esto también impacta negativamente en la comodidad de conducción y aumenta el riesgo de daños por baches o impactos.
La mejor manera de verificar la presión es cuando los neumáticos están fríos: preferiblemente antes de salir o al menos tres horas después de haber detenido el vehículo. Si planeas viajar con mucho equipaje o más pasajeros de lo habitual, es esencial ajustar la presión según las recomendaciones para esas circunstancias.
Conducir con la presión adecuada en los neumáticos no solo garantiza un viaje seguro y eficiente, sino que también ayuda a evitar gastos innecesarios y reduce el impacto ambiental, ya que el desgaste de los neumáticos libera microplásticos que afectan tanto al medioambiente como a nuestra salud. (Fuente: Presslatam)
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