Autor: Rodrigo Correa, psicólogo laboral y fundador de Valora People.
En un mundo global caracterizado por la incertidumbre, el estrés se ha convertido en una pandemia silenciosa que impacta a millones de personas. En nuestro país, este fenómeno se ve agravado por el elevado índice de delincuencia y el aumento del trabajo informal que define nuestra economía actual.
A medida que se aproxima el cierre del año, muchas empresas están en proceso de evaluación de sus resultados y la capacidad de cumplir con los presupuestos establecidos. Esta revisión no solo implica un análisis financiero, sino que también genera una presión significativa sobre los empleados, quienes enfrentan un entorno laboral cada vez más exigente. La necesidad de alcanzar metas en un contexto de crisis contribuye a un incremento notable en el estrés, afectando no solo la productividad, sino también la salud mental de los trabajadores.
Asimismo, la reciente aprobación de leyes como la Ley Karin ha reducido los plazos para el cumplimiento de obligaciones legales en las empresas. Esta mayor carga regulatoria añade aún más presión, forzando a las organizaciones a adaptarse con rapidez a nuevas normativas, lo que intensifica el estrés tanto en los equipos de trabajo como en la dirección.
Además, la inseguridad contribuye a una preocupación adicional en la vida cotidiana. La sensación de vulnerabilidad puede aumentar el estrés, haciendo que las personas se sientan constantemente alertas. Este estado de tensión puede acarrear serias consecuencias, desde problemas físicos hasta trastornos emocionales.
Es esencial que tanto las empresas como los individuos reconozcan la relevancia de gestionar el estrés de manera efectiva. Estrategias como la implementación de programas de bienestar en el trabajo, la promoción de un entorno laboral saludable y el acceso a recursos de apoyo psicológico son cruciales para combatir esta pandemia contemporánea.
Debemos priorizar nuestra salud mental y buscar maneras de reducir el estrés en nuestras vidas. Solo de esta forma podremos enfrentar los desafíos futuros con resiliencia y fortaleza.
Con Información de www.elrancaguino.cl