- Luisa Castaldi, académica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, enfatizó que el tiempo libre de los niños no debe convertirse en una carga para los adultos, ya que se pueden realizar actividades conjuntas y también permitir que los niños desarrollen sus propias iniciativas.
Con la conclusión del año escolar, comienza el periodo de descanso para los niños, lo que también presenta un reto para los padres: promover actividades que no solo ofrezcan entretenimiento, sino que también contribuyan a su desarrollo y aprendizaje.
El temor al aburrimiento parece ser una de las principales preocupaciones de los adultos durante las vacaciones. Sin embargo, Luisa Castaldi, directora de la Clínica Psicológica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, asegura que esto no tiene por qué convertirse en una carga innecesaria, ya que “es una oportunidad para no tener nada que hacer, para tomarse un tiempo libre y ver qué surge en ese lapso”.
“No es necesario estar constantemente buscando actividades, pero sí es bueno tener opciones disponibles, porque a menudo los niños se divierten más con materiales reciclados, como cartón, cajas o papeles, y con eso pueden crear cosas”, comentó la académica. En este sentido, añadió “el aburrimiento puede ser un terreno fértil para la creatividad. Es un espacio para explorar qué les gusta y qué se les ocurre. Así que es positivo fomentar el aburrimiento”.
Para la docente, preguntar a los niños qué les gustaría hacer durante las vacaciones es una buena práctica, así como motivarlos a planificar sus propias actividades, que pueden ser tan simples como ir a caminar a la playa, visitar un parque o jugar en la plaza. También destacó que estos momentos pueden dedicarse a fortalecer los lazos familiares y “transmitir a los niños que son miembros importantes de la familia y que pueden contribuir”.
Otro aspecto que los adultos deben tener en cuenta durante las vacaciones es el uso de la tecnología como forma de diversión, ya que a menudo se hace un uso excesivo de ella. En este sentido, Luisa Castaldi subrayó la necesidad de establecer horarios para el uso de pantallas, especialmente en los niños más pequeños. “Las pantallas incluyen tablets, teléfonos celulares y televisión, y es crucial llegar a un acuerdo sobre los horarios, dejando claro que cuando se termine el tiempo, se acaba el uso”, concluyó.
Con Información de eldiariodemaule.cl