El proceso avanza con la creación del expediente necesario para su inclusión en la Lista de Patrimonio Mundial, un trámite que podría tardar entre dos y tres años.
Este reconocimiento refuerza el valor histórico, cultural y productivo del Paisaje Cultural Vitivinícola del Pisco Chileno, al mismo tiempo que promueve el turismo y beneficia a las comunidades locales.
La ministra de las Culturas, junto a los ministros de Agricultura y Relaciones Exteriores, así como miembros de la Asociación de Productores de Pisco, Pisco Chile AG., celebraron en la plaza Gabriela Mistral de Vicuña la inclusión del Paisaje Vitivinícola del Pisco Chileno en la lista tentativa nacional del patrimonio cultural ante UNESCO, un paso crucial hacia el reconocimiento como Patrimonio Mundial.
Varios pisqueros de los valles del Elqui y Limarí en la Región de Coquimbo, así como del valle del Huasco en la Región de Atacama, se unieron a la celebración, junto con autoridades locales y representantes de los distintos oficios que hacen posible la producción y conservación de esta tradición cultural.
La ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Carolina Arredondo, subrayó que su institución liderará la confección y entrega del expediente que será presentado ante el Comité de Patrimonio Mundial de UNESCO: “Este es un paso significativo para que el organismo internacional acepte esta solicitud. Vienen años de trabajo conjunto entre el sector público y privado, lo que demuestra una política de Estado. El pisco chileno también aglutina un amplio espectro político, permitiéndonos hoy celebrar un hito que es relevante no solo por este expediente, sino también porque estamos en la región de una figura tan importante para nuestra cultura, en un año que conmemoramos los 80 años del Nobel de Gabriela Mistral”.
La ministra también destacó que “este tipo de reconocimientos no solo enriquecen la imagen del Pisco chileno, sino que además fomentan un turismo cultural y respetuoso con nuestro entorno”.
El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, resaltó que “es un hecho muy significativo ser el primer país de Sudamérica con un paisaje vitivinícola reconocido a nivel mundial. Y esto, como mencionó la ministra, representa turismo integral, poesía, Gabriela Mistral, un hermoso cielo, cultura, arquitectura, seguridad, queso de cabra, aceitunas y muchos otros aspectos de esta maravillosa región, abarcando los valles del Elqui y Limarí, así como el valle del Huasco en la Región de Atacama”.
El titular del agro añadió que “estamos intensificando todas las iniciativas relacionadas con la sostenibilidad de esta industria en colaboración con los gobiernos regionales y municipales, respetando las tradiciones y manteniendo un diálogo con los diferentes sectores, incluyendo también al sector apícola, entre otros”.
Francisco Munizaga, presidente de la Asociación de Productores de Pisco, Pisco Chile, expresó: “Después de la ceremonia en la plaza de Vicuña y la visita a una planta de pisco, debemos sentirnos muy orgullosos de lo que hemos alcanzado. Hemos logrado unir a dos regiones y conectar la esfera pública con la privada, reuniendo a tres ministerios y a cientos, o posiblemente miles de personas que están trabajando en torno a esta declaratoria. Todos deberíamos sentir un gran orgullo por este logro, no solo como pisqueros, sino como sociedad”.
El canciller Alberto van Klaveren, por su parte, mencionó que “hoy damos el primer paso en un proceso que necesita colaboración y compromiso. Nuestro objetivo es presentar el expediente de postulación ante la UNESCO lo más pronto posible, para que esta candidatura sea considerada en la siguiente reunión del Comité de Patrimonio Mundial en 2027”. Además, agregó que esta inclusión en la lista tentativa nacional “no solo potencia la industria pisquera chilena, sino que también enaltece nuestra herencia cultural. Estamos convencidos de que el Paisaje Cultural Vitivinícola del Pisco Chileno posee los méritos necesarios para ser parte del Patrimonio Mundial, y seguiremos trabajando incansablemente para alcanzar este objetivo”.
Después de la actualización de la Lista Tentativa, el proceso avanza con la preparación del expediente del bien, que incluye un dossier con las especificaciones culturales y naturales del pasaje cultural. Una vez enviado, UNESCO lo remitirá al Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS) para su análisis detallado, ajustes y posibles visitas técnicas por parte de expertos.
Finalmente, con base en las recomendaciones de los organismos asesores, el Comité de Patrimonio Mundial de UNESCO evaluará y decidirá sobre su posible inclusión, ya sea inmediata, con observaciones o eventual rechazo. El tiempo que transcurre entre la inclusión en la Lista Tentativa y el reconocimiento final podría tomar entre dos y tres años.
Con Información de www.diarioelpulso.cl
