Por Cristian Álvarez
A pesar de la abundancia en materiales, bienes y servicios en la actualidad, la insatisfacción sigue siendo elevada. Esto se debe a que el acceso a estos recursos muchas veces está limitado por factores económicos y personales. Además, la codicia desmedida de algunas personas ha distorsionado el propósito genuino del emprendimiento, llevándolas a buscar beneficios económicos a cualquier costo.
Estas tendencias reflejan una falta de valores en el ambiente económico, donde lucrar es legítimo, pero no debe hacerse de manera irresponsable. Un enfoque más ético y sereno puede encontrarse en “Economía Humanista”, un libro del destacado académico Joseph Ramos, ex decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile. Esta obra invita a considerar aspectos morales en el ámbito financiero, argumentando que, de haber incorporado estos valores hace años, muchas crisis económicas recientes podrían haberse evitado.
En una entrevista por correo electrónico, el autor comparte información sobre su publicación, que fue presentada el pasado 11 de noviembre en la facultad que dirigió, ante una audiencia interesada y diversos comentaristas.
¿Cómo surgió la idea de escribir este libro?
–“La insatisfacción con la enseñanza actual de la economía me impulsó a escribir ‘Economía Humanista’. A menudo, nuestros modelos enfatizan que el ser humano actúa solo por su propio beneficio, ignorando factores no monetarios que son igualmente cruciales. Por ejemplo, muchos buscan una carrera que no solo les proporcione buenos ingresos, sino que también les brinde satisfacción personal y autorrealización. Además, la justicia en los salarios y la percepción de equidad afectan profundamente la moral en el trabajo. Este fue el trasfondo que me llevó a escribir el libro, con el fin de destacar la importancia de integrar factores no monetarios en los análisis económicos.”
¿La economía genera felicidad en el presente?
–“La satisfacción material es solo un componente del bienestar. Si bien la pobreza causa desdicha, existen otros factores que juegan un papel más importante en la felicidad, como la calidad de nuestras relaciones, el significado de nuestro trabajo y la salud que disfrutamos.”
¿Cómo ha contribuido la educación económica a la formación de economistas sin empatía?
–“Al centrarnos casi exclusivamente en la maximización del ingreso personal, corremos el riesgo de considerar a las personas como meros egoístas. Olvidamos así la capacidad de empatía, que es crucial para fomentar la cooperación dentro de las organizaciones. Las empresas requieren tanto competencia como colaboración para prosperar.”
¿Cuál es la relación entre filosofía y economía?
–“La filosofía influye indirectamente en la economía, afectando nuestra percepción del ser humano y sus motivaciones. Se relaciona con cómo definimos la justicia y el bienestar, lo cual es fundamental para entender las decisiones económicas.”
¿Cómo han influido las emociones en la economía chilena en los últimos 50 años?
–“Las emociones impactan decisiones fundamentales, desde la elección de pareja hasta la carrera profesional. La confianza se convierte en un factor esencial en negocios, y nuestros valores impactan en nuestras decisiones de consumo, especialmente en lo que respecta a la sostenibilidad y la calidad.”
¿La libertad económica trae satisfacción o frustración?
–“El mercado recompensa a los productores exitosos y frustra a los que no lo son. Sin embargo, también brinda satisfacción a los consumidores, siempre que exista la competencia adecuada para garantizar productos de calidad a precios justos.”
¿La nueva generación de emprendedores considera aspectos humanistas en sus negocios?
–“Si bien los emprendedores se centran en la rentabilidad, cada vez valoran más la calidad de sus productos y el trato justo hacia sus trabajadores, buscando fidelizar a sus colaboradores.”
¿Es el sistema neoliberal desalmado y salvaje?
–“Depende de la interpretación. Si se refiere a una economía de mercado competitiva, puede ser beneficioso. Sin embargo, una sociedad en la que solo prevalece el interés individual sin consideración por los demás sí puede ser cruel. Es esencial que todos tengan acceso a bienes y servicios básicos, como educación y salud, independientemente de sus recursos.”
¿Es posible construir una economía más humanista en el futuro?
–“A pesar del pesimismo actual, hay motivos para ser optimistas. Hemos avanzado en humanismo comparado con el pasado, pero todavía queda trabajo por hacer para eliminar desigualdades y oportunidades desiguales. El progreso es posible siempre que actuemos en favor del bien común.”
Con Información de radioportales.cl