Pocas horas después de anunciar una sorpresiva declaración de ley marcial que generó protestas e incertidumbre, el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol,declaró el levantamiento de dicha medida.
En un discurso televisado, el presidente afirmó que revocaría esta decisión tan pronto como pudiera convocar al número necesario de miembros de su gabinete.
Efectivamente, lo hizo poco después.
La ley marcial permite que las autoridades militares asuman funciones extraordinarias y, en gran medida, del gobierno, además de suspender ciertas libertades públicas.
Yoon justificó su implementación afirmando que era para «proteger el orden constitucional democrático» de las «fuerzas pronorcoreanas» que, según él, operaban en el país.
El inesperado anuncio generó una ola de tensión en Corea del Sur, ya que muchos interpretaron la decisión como un giro hacia el autoritarismo perpetrado por Yoon.
Ante esta situación, el Parlamento, dominado por la oposición, se reunió de manera urgente y aprobó rápidamente bloquear el decreto de emergencia y la ley marcial, a la que se opusieron tanto los líderes de la oposición como del partido del presidente.
No obstante, según informes de la televisión estatal, el ejército anunció que la ley marcial permanecería vigente hasta que el presidente decidiera levantar el estado de emergencia.
Fuera del Parlamento, donde las actividades debían estar suspendidas con la ley marcial en vigor, se congregaron personas para protestar contra la decisión de Yoon, gritando en contra de la ley marcial mientras la policía activaba sus sirenas.
Algunos efectivos militares ingresaron al Parlamento, generando momentos de confusión; sin embargo, según declaraciones del presidente de la Cámara citadas por la agencia local de noticias Yonhap, las tropas finalmente abandonaron el edificio.
Poco después, la multitud reunida frente al Parlamento celebró cuando Yoon anunció su decisión de anular la medida, según un reporte de AFP.
Sin embargo, los manifestantes indicaron que no se marcharían del lugar hasta que todas las fuerzas de seguridad desplegadas se retirasen.
La sorpresiva decisión del presidente surcoreano llevó a especulaciones sobre qué lo llevó a adoptar una medida tan drástica.
Después de haber perdido el control del Parlamento este año,el gobierno vio cómo su capacidad para aprobar leyes e iniciativas se debilitaba. Tanto el gobierno como la oposición se enfrentan ahora por la aprobación del nuevo presupuesto nacional.
Además, cuando Yoon anunció la ley marcial, sus críticos le acusaron de recurrir a una táctica antidemocrática, utilizando un falso motivo de seguridad nacional para sofocar a la oposición.
La reacción
El anuncio de la revocación de la ley marcial por parte del presidente surcoreano generó sorpresa y desconcierto entre los legisladores, quienes se mostraron incrédulos sobre cómo Yoon pudo haber tomado una decisión tan extrema y luego retirarla con tanta facilidad.
Entre los parlamentarios opositores parece haber consenso en que el mandatario debería renunciar ahora o enfrentar un impeachment.
La ley marcial fue rechazada tanto por la oposición como por algunos líderes del oficialismo.
Después de su anuncio, Lee Jae-myung, líder del principal partido opositor, el Partido Democrático, convocó una reunión urgente del Parlamento esa misma noche para votar contra la ley marcial y revocarla.
No obstante, como mostraron las imágenes de televisión, vehículos policiales bloquearon el acceso al edificio del Parlamento en Seúl.
En el lugar, se reunieron grupos de manifestantes que, gritando«No a la ley marcial»se enfrentaron con los policíasdeptados en la zona.
Finalmente, los diputados lograron reunirse y votar en contra del decreto de emergencia propuesto por el presidente.
Cómo se llegó hasta aquí
La oposición surcoreana logró una victoria contundente en las elecciones de abril.
Desde entonces, el gobierno no ha podido aprobar las leyes que deseaba impulsar y se ha visto obligado a conformarse con vetar aquellas aprobadas por la oposición.
Yoon, quien es presidente desde 2022 y miembro del Partido del Poder Popular, ganó las elecciones presidenciales al derrotar a su rival, Lee Jae-myung, por apenas 0,7 puntos porcentuales, lo que constituyó la elección más reñida desde que Corea del Sur instituyó elecciones directas en 1987.
A su vez,la popularidad de Yoon ha disminuido entre varios escándalos de corrupción.Uno de estos involucra a la primera dama, quien supuestamente recibió un bolso de Dior como regalo.
El mes pasado, Yoon se vio obligado a disculparse en televisión y anunció la creación de una oficina que supervise las actividades de la primera dama, aunque rechazó la propuesta de investigar los hechos que la oposición reclamaba.
Recientemente, la oposición recortó el presupuesto del gobierno, dejando al presidente sin casi margen de maniobra, dado que la ley de presupuesto no se puede vetar.
La mayoría opositora que controla el Parlamento también ha comenzado los trámites para destituir a varios ministros.
La declaración de ley marcial representa el último y más extremo capítulo en un conflicto que enfrenta a Corea del Sur a su crisis institucional más grave en tiempos recientes.
(Imágenes: EPA
PURANOTICIA // BBC MUNDO
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