El líder del gobernante Partido del Poder del Pueblo (PPP) solicitó la inmediata suspensión de las funciones del presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, tras revelarse que el mandatario ordenó el arresto de destacados líderes políticos del país durante la declaración de la ley marcial, la cual fue derogada horas después por la Asamblea Nacional.
«Dado los acontecimientos recientes, considero que es crucial suspender rápidamente las funciones del presidente Yoon Suk Yeol para salvaguardar a la República de Corea y a su población», afirmó Han Dong Hoon en una reunión de urgencia de su partido en la sede del legislativo.
El líder del PPP aseguró tener «pruebas verificables» que indican que el presidente dio instrucciones al comandante de contrainteligencia, Yeo In Hyung, para detener a figuras políticas relevantes, incluyéndose a él mismo y al líder del partido opositor, Lee Jae Myung.
En este contexto, Han advirtió que el presidente en funciones podría tomar nuevamente «acciones radicales» si permanece en el cargo, lo cual podría poner al país en un «grave peligro».
Estas declaraciones se producen en un momento clave, ya que se aproxima la votación del ‘impeachment’ contra Yoon. Para que la moción de destitución tenga éxito, se requiere el apoyo de al menos ocho diputados del PPP. Aunque el partido ha pedido unidad entre sus miembros para evitar la aprobación de la moción, las declaraciones de Han representan un cambio significativo en la posición del grupo.
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