Desarrollan creativas estrategias educativas para fomentar el pensamiento crítico y la educación financiera.

La profesora Carolina Farias utiliza enfoques educativos innovadores que motivan a los estudiantes, fomentando su participación en las clases y mejorando la experiencia educativa.

El «cuaderno de la casita» y el «sistema de los morlacos» son algunas de las actividades que ha implementado la profesora Carolina Farias, quien enseña a 36 alumnos en el Colegio Altair de Batuco, comuna de Lampa.




Con más de 10 años de experiencia, Carolina ha ideado estrategias para motivar y participar a sus alumnos. “El cuaderno de la casita permite que los estudiantes lleven a casa un texto informativo diario, del cual deben hacer un resumen y expresar su opinión. Esta actividad busca fomentar la lectura y la escritura, mejorando así la fluidez y comprensión lectora. También promueve la formación de opiniones sobre temas de interés”, explica.

Los positivos resultados del «cuaderno de la casita» han llevado a replicar esta idea en otros cursos.

Sistema de los Morlacos


Otra actividad motivadora ha sido el “Sistema de los morlacos”, desarrollado a lo largo del año. “Inspirada en una estrategia de un colega, la idea consiste en otorgar ‘billetes’ (personalizados con mi cara) como refuerzo positivo. Una vez a la semana, los alumnos pueden gastar su dinero en diversas recompensas. También hemos creado una ‘tarjeta de ahorro’ para evitar la pérdida de sus ahorros”, añade la docente.

Además, Carolina cuenta con el apoyo de la educadora diferencial Treisy Iturra, quien contribuye a enriquecer el proyecto de los morlacos. “Juntas, presentamos esta idea a la jefa de UTP, quien nos brindó su apoyo y sugerencias para su correcta implementación. Ahora, otros docentes también pueden entregar morlacos por tareas realizadas”, comenta.

Esta estrategia ha evolucionado positivamente, con los estudiantes proporcionando nuevas ideas para mejorarla. “Hemos introducido la Morlacard, una tarjeta donde los alumnos pueden depositar su dinero y utilizarla, la cual está protegida con un código (que consiste en operaciones mentales de multiplicación)”, explican.

Resultados


“Los docentes que trabajan con el curso reportan cambios positivos en la actitud de los estudiantes y en su capacidad para resolver problemas. Muchos padres también se involucran de manera activa apoyando las estrategias implementadas por la profesora Treisy y yo, generando una respuesta muy favorable en general”, señala.

Los alumnos se sienten felices al ganar un morlaco por su esfuerzo y comienzan a contar mentalmente cuántos tienen y cuántos más les faltan para canjear por un premio.

“Sería asombroso replicar esta idea. ¡A qué niño no le gustaría canjear un premio por su buen desempeño! Es una way de reconocer el esfuerzo y se ve reflejado en sus rostros felices”, concluye.

“Con la profesora Treisy hemos adquirido premios para que los estudiantes puedan intercambiarlos, y la experiencia ha sido muy positiva. Definitivamente, esta idea motiva a los estudiantes, fomenta autonomía en el manejo del dinero, estimula cálculos matemáticos, y les hace sentir comprometidos con su aprendizaje. Asisten a clases con una actitud positiva, cumplen con sus tareas, y se presentan con un propósito claro. Hay innumerables beneficios que se han observado con esta estrategia”, finaliza.