Ninoska Berríos, quien fue nombrada seremi de Desarrollo Social y Familia en Tarapacá, perdió su cargo en menos de 24 horas al confirmarse que no cumplía con los años de experiencia profesional requeridos.
Información proporcionada por el medio asociado: BBCL.
El gobierno se enfrenta a una nueva controversia en la Región de Tarapacá tras la destitución de Ninoska Berríos Barrios, quien había sido designada como seremi de Desarrollo Social y Familia. La decisión fue revertida en menos de 24 horas, al comprobar que Berríos no cumplía con los requisitos solicitados para el cargo, especialmente los dos años de experiencia laboral necesarios.
A pesar de su reciente nombramiento, Berríos contaba con apenas 65 días desde su titulación como Ingeniera en Información y Control de Gestión. En sus redes sociales, la flamante seremi había realizado un saludo protocolar al delegado presidencial de Tarapacá, Daniel Quinteros, antes de que su destitución se oficializara.
El gobierno había resaltado su formación académica, que incluye diplomados en Administración Pública y una eventual candidatura a un MBA en Administración y Dirección de Empresas, pero esto no fue suficiente para compensar la falta del requisito fundamental. Las críticas en la región no solo apuntaron a su trayectoria profesional, ya que Berríos cuenta con múltiples conexiones en el ámbito público y privado.
Entre sus vínculos se encuentra su padre, Rubén Berrios Camilo (58), también miembro del PS, ex consejero regional y actual jefe de la División de Desarrollo Social y Humano del Gobierno Regional de Tarapacá, bajo la administración del gobernador José Miguel Carvajal (Independiente-exComunes).
Su tío, el ingeniero civil industrial Iván Berrios Camilo (53), también resalta, ya que desde junio preside el directorio de ZOFRI y antes lideraba la Cámara Chilena de la Construcción en la región.
Las autoridades locales aún no han hecho oficial el nombramiento de un reemplazo que permita resolver la controversia, la cual se ha visto agravada por la reciente salida de su antecesor, Cristián Jara, implicado en un caso de acoso laboral.
Este incidente pone de manifiesto la necesidad de una revisión más rigurosa de los nombramientos en la administración pública, generando críticas tanto por la falta de experiencia como por los vínculos familiares de Berríos en la región.
Con Información de www.diarioelcentro.cl