Control parental en teléfonos inteligentes: ¿De qué manera resguardar a los niños en la era digital?

Durante la temporada navideña, muchos niños reciben smartphones como regalo, por lo que es fundamental comprender cómo funciona la privacidad para asegurar un uso adecuado y sin inconvenientes.

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Hoy en día, los smartphones son una herramienta indispensable en nuestra vida cotidiana, pero representan un gran desafío para los padres, especialmente en lo que respecta a la protección de los niños en el extenso mundo de Internet. Con acceso a aplicaciones, redes sociales y contenido en línea, que puede ser tanto educativo como dañino, es esencial implementar medidas que aseguren un uso seguro y responsable de la tecnología entre los más jóvenes, especialmente en esta época festiva.

Es vital explorar e implementar estrategias efectivas para aplicar el control parental en los dispositivos móviles, lo que permitirá educar a los niños en el uso saludable de la tecnología.

Protegiendo un Internet seguro

Xiaomi ha desarrollado herramientas específicas para ayudar a los padres a supervisar y gestionar el acceso de sus hijos a Internet. Estas soluciones integradas permiten establecer límites de tiempo, filtrar contenido y monitorear la actividad digital de los menores.

Dentro de los smartphones Xiaomi, se encuentra la aplicación de «bienestar digital», que brinda a los padres la oportunidad de establecer normas digitales claras. Esta herramienta permite aprobar o rechazar descargas de aplicaciones, fijar horarios de uso y localizar el dispositivo en caso de extravío. Estas funciones nativas, desarrolladas por los propios fabricantes de los sistemas operativos, ofrecen una experiencia de control parental efectiva y fluida.

Además, existen diversas aplicaciones de terceros que ofrecen funcionalidades avanzadas. Estas herramientas permiten no solo filtrar contenido, sino también monitorear las redes sociales de los niños, bloquear sitios web peligrosos y recibir alertas sobre posibles amenazas, como ciberacoso o interacciones sospechosas. Estas aplicaciones son excelentes opciones para los padres que buscan personalizar la supervisión de los dispositivos.

Construyendo un Internet seguro para todos

Aunque las herramientas digitales son cruciales, no sustituyen la importancia de la educación y el diálogo abierto entre padres e hijos. Crear un ambiente de confianza donde los niños se sientan cómodos compartiendo sus experiencias en línea es esencial para garantizar su seguridad digital.

Una de las estrategias más efectivas consiste en mantener una comunicación constante sobre los riesgos presentes en Internet, como el ciberacoso, el contacto con desconocidos o el acceso a contenido inapropiado. Es fundamental que los niños entiendan que pueden acudir a sus padres si se enfrentan a situaciones incómodas o peligrosas en línea. Este diálogo debe basarse en la confianza y no en el miedo, de modo que los niños vean a sus padres como aliados en el ámbito digital.

«Se recomienda utilizar el control parental para conocer qué están mirando nuestros hijos, qué juegos están utilizando y qué páginas están visitando. No debe usarse como una herramienta de prohibición, sino para estar informados y educar a los niños sobre un buen uso de la tecnología. Esto tiene que ser un recurso para unir a la familia y conocer los intereses de nuestros hijos, fortaleciendo la comunicación con ellos», comenta Camilo Bastías, psicólogo del Grupo Cetep.

Establecer reglas claras para el uso del smartphone es también esencial. Estas normas pueden incluir horarios específicos para el uso del dispositivo, prohibir llevar el teléfono a la mesa durante las comidas o limitar el uso de redes sociales. Estas medidas ayudan no solo a proteger a los niños de los riesgos en línea, sino también a promover un equilibrio saludable entre el tiempo frente a la pantalla y las actividades fuera de ella.

A medida que los niños crecen, es importante ajustar las restricciones y la supervisión. Los adolescentes, por ejemplo, pueden necesitar más libertad para acceder a contenido educativo o socializar con sus amigos. Sin embargo, esta libertad debe ir acompañada de supervisión responsable para evitar que se expongan a riesgos innecesarios.