Consejos para mantener una alimentación equilibrada durante las celebraciones de fin de año.

La llegada del fin de año trae consigo celebraciones, reuniones y, por supuesto, una variedad de comidas exquisitas. No obstante, estas festividades pueden llevarnos a consumir más de lo habitual o a perder el equilibrio en nuestra alimentación.

De acuerdo con Natalia de la Horra, nutricionista de Sportlife, “es completamente posible disfrutar de estas fiestas en compañía de nuestros seres queridos y mantener una dieta equilibrada. La clave está en no privarse de los placeres, pero siempre tomando decisiones conscientes que protejan nuestro bienestar mientras disfrutamos de la temporada festiva”, afirma la experta.

Uno de los principales retos durante estas fechas es el aumento drástico de la ingesta calórica. En este contexto, Natalia de la Horra ofrece algunos consejos sencillos.

Planifica tus comidas. Antes de asistir a una cena o fiesta, es recomendable consumir alimentos ligeros y nutritivos a lo largo del día, priorizando vegetales, frutas y proteínas magras. Esto ayudará a controlar el apetito y evitar excesos a la hora de la comida.
Elige tus favoritos. No es necesario probar todo lo que haya en la mesa. Elige tus platillos preferidos y disfruta de cada bocado. “Es fundamental priorizar alimentos saludables y limitar el consumo de los más procesados o ricos en grasas saturadas”, explica Natalia de la Horra.
Sirve tu plato inteligentemente. La especialista sugiere que un plato equilibrado debería incluir:

50% de vegetales, ya sea crudos o cocidos, como ensaladas frescas o asadas.
25% de proteínas magras, como pavo, pescado y pollo, o incluso opciones vegetarianas.
25% de carbohidratos, prefiriendo opciones integrales o porciones moderadas de guarniciones tradicionales como papas o arroz.

Controla las porciones. Es fácil excederse en estas festividades. Un consejo es usar platos pequeños para servir la comida y esperar unos minutos antes de decidir si realmente necesitas una segunda ración.
Mantente hidratado. Frecuentemente, confundimos la sed con hambre. Beber suficiente agua durante el día ayuda a prevenir excesos. Además, se recomienda alternar cada bebida alcohólica o azucarada con un vaso de agua.
Modera el consumo de alcohol. Las bebidas alcohólicas suelen ser altas en calorías y pueden disminuir nuestro autocontrol al comer. Es preferible optar por opciones menos calóricas, como vino seco o cócteles simples, evitando aquellos que contengan jarabes o jugos azucarados.
Consciénciate sobre el postre. Los dulces son parte integral de esta época, pero es posible disfrutarlos con moderación. Toma una pequeña porción y acompáñala con fruta fresca para reducir el riesgo de comer en exceso y saborear cada bocado.
Mantén la actividad física. Incorpora algo de ejercicio durante las festividades: una caminata familiar después de la cena o algún juego activo con los niños pueden contribuir a mantenernos en movimiento.
No te castigues. Si un día comes más de lo habitual, no te preocupes. Retoma hábitos saludables al día siguiente sin caer en restricciones extremas.