viernes 21 febrero 2025
31 C
Santiago

Con la inteligencia artificial como elemento clave: las estrategias de los cibercriminales para llevar a cabo estafas amorosas.

Aunque el 14 de febrero se conmemora el Día de San Valentín, los estafadores en línea aprovechan las estafas románticas durante todo el año, buscando obtener información confidencial o beneficios económicos. Por ello, ESET, líder en detección proactiva de amenazas, revisa las principales estafas amorosas que están circulando actualmente en el entorno digital, analiza cómo los atacantes están utilizando la inteligencia artificial (IA) para su beneficio y ofrece ejemplos para crear conciencia sobre la magnitud y las consecuencias de estos engaños.

Uno de los tácticas más comunes utilizadas por los cibercriminales es apelar al amor. A través de la promesa de una relación perfecta y duradera, engañan a sus víctimas para obtener algún tipo de beneficio

ESET enumera diversos tipos de fraudes o engaños para que se puedan identificar rápidamente y así evitar ser víctima de situaciones que podrían causar más daño que un corazón roto:

  • Catfishing: Consiste en crear un perfil falso en redes sociales o aplicaciones de citas con la intención de engañar o estafar. El atacante utiliza estos perfiles falsos para recoger información de sus víctimas, ganar su confianza y obtener un beneficio, generalmente económico.

Las excusas más comunes empleadas por los estafadores en catfishing son diversas:

– Enfermedad o encarcelamiento: Después de establecer un vínculo, el estafador comienza a solicitar dinero por problemas relacionados con cuentas bancarias o gastos en el sistema penitenciario.

– Inversión segura: La aparente relación amorosa se transforma en una consejo infalible de inversión en dinero o criptomonedas, prometiendo grandes rendimientos, aunque el verdadero beneficiario es el estafador.

– Militar en el extranjero: Tras crear un fuerte vínculo afectivo, utilizan diversas excusas para solicitar dinero, ya sea para el regreso en avión o para gastos médicos.

– Regalos costosos: El estafador solicita a la víctima que le ayude con el pago de impuestos necesarios para recibir un regalo de lujo.

– Propuestas apresuradas de matrimonio: El estafador pedirá dinero para su boleto de avión o para organizar una supuesta boda, haciendo que el dinero termine en su cuenta.

– Herencia millonaria: Aduce contar con una gran herencia que requiere el pago de ciertos impuestos de aduana. La víctima solo verá cómo se vacía su cuenta bancaria.

– Naufragio en una plataforma petrolera: Se basa en el romance generado con un supuesto ingeniero de una plataforma. Una vez ganada la confianza, comienza a pedir dinero.

– Extorsión a través de fotos íntimas: Luego de construir un vínculo sólido, el estafador pide fotos comprometedoras y extorsiona a la víctima con hacerlas públicas si no recibe el dinero solicitado.

  • Kittenfishing: Aunque este fenómeno no siempre implica a un cibercriminal, se refiere a un tipo de engaño «menor» en el que las personas se presentan en aplicaciones de citas con una versión alterada o exagerada de sí mismas. El término describe situaciones que van desde la exageración de rasgos personales hasta la distorsión de anécdotas con el fin de resultar más atractivas e interesantes para quienes conocen en línea.

Aunque el kittenfishing puede considerarse una forma “ligera” de engaño, las consecuencias pueden ser significativas, incluyendo frustración, desilusión y desconfianza, lo que puede dificultar futuras relaciones.

Con el auge de las aplicaciones de citas, los estafadores han fijado su atención en estas plataformas. Existen estafas construidas específicamente en torno a ellas:

– Sitios de citas fraudulentos: Buscan recopilar datos de las personas que se registran. Suelen ofrecer promociones atractivas para adquirir membresías premium, obteniendo así información bancaria.

– Estafa de verificación falsa en Tinder: Consiste en un mensaje que afirma que es necesario verificar la cuenta a través de un enlace, con el que se entregan datos personales y bancarios al estafador.

– Páginas falsas con malware: Otra modalidad ocurre cuando el estafador invita a la víctima a visitar su sitio personal o un perfil en redes sociales, que en realidad contiene spam o malware.

Una tendencia reciente en estafas amorosas está relacionada con el uso creciente de la Inteligencia Artificial. Esta tecnología se está utilizando principalmente para llevar a cabo estafas amorosas mediante videollamadas falsas. Los deepfakes son una tecnología de IA que permite crear videos muy realistas, manipulando el rostro y la voz de la persona.

El modus operandi de estas estafas siempre es el mismo: comienza con un contacto en aplicaciones de citas o redes sociales, utilizando perfiles falsos con imágenes y videos manipulados digitalmente. Debido al alto grado de realismo que se alcanza en las videollamadas mediante deepfakes, las víctimas quedan convencidas de estar interactuando con una persona real. Con sus habilidades en ingeniería social, los cibercriminales logran mantener esta “relación” durante semanas o meses, creando un sólido vínculo emocional y de confianza.

El siguiente paso es solicitar a la víctima grandes sumas de dinero, empleando excusas como emergencias familiares o problemas personales graves. Las consecuencias para las víctimas son devastadoras, no solo por la pérdida económica, sino también por el impacto emocional que conlleva.

Para evitar caer en este tipo de estafas románticas, es fundamental reconocer las señales o alertas que podrían indicar que algo sospechoso está ocurriendo. ESET comparte las siguientes recomendaciones:

– Si alguien que se acaba de conocer manifiesta sentimientos profundos y sugiere continuar la conversación fuera de la App o plataforma, es motivo para tener precaución. Querer salir de la plataforma debe ser al menos un indicativo de alerta.

– Desconfiar si se observan inconsistencias entre lo que dice y lo que muestran sus perfiles en redes sociales. Prestar atención a su comportamiento: si formula muchas preguntas o evade responder las que se le hacen.

– Cualquier pedido de dinero o regalos en una relación virtual debe ser un motivo de desconfianza: nunca enviar dinero a alguien que no se conoció en persona.

– Desconfiar de quienes siempre tienen una excusa para no concretar un encuentro en persona.

– Es recomendable realizar búsquedas en línea sobre las imágenes que se reciben o en sus perfiles, utilizando herramientas como Google Images o TinEye para verificar su identidad.

– No compartir información íntima o confidencial, así como fotos o videos, hasta no conocer a la persona en un contexto real.

– Si se decide coordinar un encuentro personal con alguien conocido en línea, siempre es recomendable informar a alguien cercano sobre la situación.

Con Información de osornoenlared.cl

Más leído esta semana

Temas

spot_img

Artículos relacionados

Categorías populares

spot_imgspot_img