La Asamblea General de las Naciones Unidas ha designado el 11 de febrero como el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia. Es fundamental reconocer la contribución de las mujeres en el ámbito de la investigación y el desarrollo científico; no obstante, esta fecha también nos brinda la oportunidad de reflexionar sobre las acciones que podemos emprender como país para aumentar la participación femenina en un campo donde persisten marcadas desigualdades de género.
En efecto, los datos muestran que las mujeres están subrepresentadas en la lideración de proyectos científicos y en la publicación de artículos en revistas de prestigio, donde la presencia masculina es notablemente superior. A esto se suma el fenómeno conocido como “segmentación horizontal”, que se refiere a la concentración de mujeres en áreas del conocimiento tradicionalmente menos valoradas, como las ciencias sociales, la educación y las humanidades, las cuales suelen tener menores remuneraciones.
Diversos estudios evidencian la existencia de sesgos de género en los procesos educativos, lo que resulta en estímulos diferenciados para hombres y mujeres en las aulas. Así, los hombres reciben más retroalimentación en matemáticas y ciencias, mientras que las mujeres son más alentadas en lenguaje, repercutiendo en su desempeño académico, sus decisiones vocacionales y, en última instancia, en sus aportes en el ámbito científico.
A pesar de los múltiples desafíos que se deben afrontar para cambiar esta situación, está claro que las universidades, y en particular las facultades de educación, tienen una importante responsabilidad en la formación de profesionales que sean conscientes de sus propios sesgos de género. Deben también estar equipados con herramientas para fomentar una educación equitativa que permita el desarrollo igualitario de hombres y mujeres. De esta manera, no solo ampliaremos y visibilizaremos la participación de más mujeres en las ciencias, sino que también contribuiremos a construir una sociedad más justa, donde todos y todas tengan las mismas oportunidades para desarrollar sus capacidades.
Rolando Poblete Melis, director del Magíster en Gestión de la Educación Inclusiva UST. Embajador del Proyecto InEs Género
Con Información de www.elrancaguino.cl
