Este será el primer encuentro de este cometa con nuestra región del universo, y su paso cercano al Sol tiene el potencial de generar un fenómeno brillante, siempre que las condiciones lo permitan.
El cometa alcanzará su punto más cercano al Sol, conocido como perihelio, el 13 de enero. En ese momento, el cometa reflejará una luz intensa, pudiendo incluso brillar con la luminosidad de Venus, o más aún, si su magnitud alcanza el valor de -7. Los astrónomos indican que este será el momento ideal para observarlo, pues será visible al atardecer, hacia el oeste, a partir de las 21:00 horas en Chile.
No obstante, debido a su proximidad al Sol, la visibilidad se dificultará, por lo que se recomienda alejarse de las luces urbanas y buscar lugares elevados con buena vista del horizonte.
Los cometas, formados por materiales congelados y gases, son vestigios de la creación del sistema solar. A medida que se aproximan al Sol, el calor provoca la evaporación del hielo, dando lugar a la brillante estela que los sigue.
A pesar de que el calor extremo podría causar su desintegración parcial, los científicos mantienen la esperanza de que el cometa sobreviva a su paso cercano al Sol.
Desde el 11 de enero, el cometa ya será observable en el cielo matutino del hemisferio sur y se espera que brille con mayor intensidad a medida que se acerque a su perihelio. Aunque la observación puede ser difícil sin binoculares o telescopios, aplicaciones como Sky Tonight o Star Walk permitirán a los entusiastas seguir su localización en el cielo, facilitando su visualización.
Este fenómeno no solo representa una oportunidad para los amantes de la astronomía, sino también para aquellos deseosos de contemplar la belleza del universo.
Con Información de www.diarioelcentro.cl