Cataldo declara que «las bombas molotov son consideradas armas» en el contexto de las nuevas medidas para el INBA.

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Este jueves, el Ministerio de Educación anunció las acciones que se llevarán a cabo en el Internado Nacional Barros Arana (INBA) luego de la explosión que dejó a 35 estudiantes heridos, de los cuales 25 siguen hospitalizados, y 16 presentan lesiones graves. El ministro Nicolás Cataldo rechazó de forma contundente el uso de bombas molotov y aseveró que este tipo de manifestaciones violentas no tienen justificación.

En una conferencia de prensa, Cataldo manifestó su fuerte oposición a los actos de violencia, enfatizando el riesgo que representan las bombas molotov por su capacidad destructiva. El ministro subrayó que tales acciones no pueden ser clasificadas como movilizaciones sociales, resaltando que «no hay demandas, objetivos ni rostros detrás de estos actos».

El ministro también mencionó la disminución de incidentes violentos en los centros educativos en los últimos años, aunque enfatizó que lo ideal sería erradicar estos actos por completo. Asimismo, llamó a abordar estos temas con responsabilidad en el debate público y a no legitimar la violencia como forma de protesta.

Cataldo anunció diversas medidas para el INBA. Entre ellas, se ofrecerá apoyo psicosocial y emocional a la comunidad escolar en colaboración con el Ministerio de Salud, además de fortalecer la convivencia educativa. También se implementarán medidas de seguridad para proteger los alrededores del establecimiento antes del regreso a clases previsto para el lunes.

El delegado presidencial de la Región Metropolitana, Gonzalo Durán, confirmó que se presentará una querella contra los responsables del incidente, calificando los hechos de «máxima gravedad e intolerables». Resaltó, además, que el establecimiento había estado mostrando una evolución positiva en la reducción de situaciones que comprometen el orden público antes de lo sucedido.

Las autoridades enfatizaron la importancia del papel de los adultos en la educación de las nuevas generaciones y en la construcción de una sociedad sin violencia, reiterando que no se debe justificar el uso de armas incendiarias en ningún contexto.