El canciller Alberto van Klaveren desmintió un desencuentro con los representantes argentinos durante la cumbre del G20 en Río de Janeiro, lo que provocó que las principales autoridades diplomáticas de Argentina decidieran no participar en la ceremonia que conmemora los 40 años del Tratado de Paz y Amistad, programada para este lunes.
Para este acto que se llevará a cabo en el Vaticano, donde asistirá el papa Francisco, se han convocado delegaciones de ambos países: la delegación chilena estará encabezada por el ministro de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren, mientras que Argentina no contará con su canciller, Gerardo Werthein, quien se ha marginado del evento.
Según el canciller argentino, la razón de su ausencia se debe a un “desencuentro” con funcionarios del Gobierno chileno que ocurrió durante la cumbre del G20 la semana pasada.
Sin embargo, van Klaveren aclaró a El Mercurio que “en la reunión del G20 hubo diálogo entre todos los líderes presentes. El Presidente Boric expuso la postura de nuestro Gobierno, la cual coincidió en gran medida con la de la mayoría de los asistentes”.
“No hubo diálogo bilateral, ni mucho menos un enfrentamiento”, destacó. “Nuestro Presidente se expresó de manera adecuada y enfatizó su respeto por opiniones diferentes”.
El canciller chileno también mencionó que “esta conmemoración fue organizada por la canciller Diana Mondino (predecesora de Werthein), con quien habíamos acordado reunirnos con el Santo Padre. Ha habido cambios en la Cancillería argentina, no solo en la figura del canciller, sino en varios niveles también”.
En este sentido, enfatizó que “a Chile le resulta fundamental estar presente, dado que se trata de una audiencia con el Jefe de Estado del Vaticano, y por lo tanto estamos aquí».
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