La Fundación Apolo ha interpuesto una denuncia contra el ex presidente de Bolivia, Evo Morales, por trata de personas con fines de explotación sexual y abuso infantil, alegando que estos delitos habrían ocurrido durante su período de asilo en Argentina, entre 2019 y 2020.
De acuerdo con la denuncia, Morales convivió «con menores de edad que habrían sido traídas desde Bolivia en condiciones supuestamente vulnerables, para realizar tareas domésticas y personales».
Angélica Ponce, exdirigente intercultural boliviana y cercana a Morales, ha declarado que, durante sus visitas a Argentina, observó a menores realizando labores «serviles»en la residencia del ex presidente boliviano.
Ponce también afirmó que Morales recibía «niñas como obsequios» de personas que buscaban obtener favores del gobierno, un hecho que, según ella, era de dominio público entre los círculos cercanos al mandatario.
La denuncia fue presentada por el director de la Fundación Apolo, Yamil Santoro, junto al jefe de legales de la entidad, José Magioncalda, y el abogado Ignacio Falcón. El caso ha sido asignado por sorteo a la jueza federal María Servini, conocida por su trabajo en la investigación de los crímenes del Franquismo.
La Fundación Apolo también recordó que no es la primera vez que Morales enfrenta acusaciones de este tipo. En 2020, medios bolivianos informaron sobre una supuesta relación entre Morales y Noemí Meneses Chávez, quien tenía 14 años al inicio de su vínculo con el ex mandatario.
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